popurrí


Popurrí de noticias. No tengo tiempo para explayarme, así que enumero rapidito y me voy a poner a punto el palacio para mi princesa:

La paradoja de la prueba del exudado: Misterios de la Sanidad. Estoy por llamar a Javier Sierra. Dos días después de salir de cuentas van y me dan los resultados del exudado. Qué poca vergüenza tienen. Por cierto: el resultado es negativo. Por lo menos me olvido de antibióticos y de ir con tiempo al hospital.

Mi penúltimo día de trabajo: «no quiero verte más por aquí con ese pedazo de barriga. Vete ahora mismo a pedir la baja, por Dios» esas han sido las últimas palabras de Arturo, el boss. Mañana, después del registro, cierro todos mis temas pendientes y vuelo a mi médico de cabecera. Ahora sí que necesito todo el tiempo del mundo para ordenar mi apartamento de los playmobil.

Blanco nuclear: Increíble e infinito. Esos son los adjetivos que describen la nueva estética de mi nido total look. Ha sido toda una experiencia volver a casa: la luz entra a raudales y las paredes se mezclan con el suelo, no hay límites. Ya está todo limpio y preparado para empezar a poner cada cosa en su sitio. Mañana colocan las puertas lacadas. Por cierto, he comprobado con mayúsculo horror que mis antiguos muebles se dan de narices con el nuevo entorno inmaculado: ahora necesito inmediatamente algo que no tengo: tiempo para redecorar mi vida.

La cápsula de lo innombrable: No me queda otra alternativa. Acabo de volver de la panadería con dos cajas gigantes de cartón. Ha sido una decisión instintiva: voy a encapsular en ellas todo lo relacionado con Jota. Quizás es una tontería fruto de mi particular ritual de limpieza espiritual pero no puedo manchar mi casa con recuerdos insanos. Comienzo una nueva vida donde lo patológico no puede convivir con Malena. Ropa, DVDs, láminas,  fotos, mi lampara de la mesita de noche, el juego de café que me regaló para mi cumpleaños… Todo al trastero y precintado. No lo tiro porque forma parte de mi historia y quizá algún día tenga que abrirlo de nuevo para recordar. Estreno sábanas y funda nórdica a partir de hoy: la ropa de cama la acabo de dar a la iglesia.

Mi fiel Caro se ha auto declarado «padre» de la criatura y no quiere separarse de mi hasta que me ponga de parto. Me he negado rotundamente a que duerma en casa: ella merece respirar en su espacio y yo necesito aprender a vivir estos últimos momentos con la serenidad que sólo puede aportarme estar a solas conmigo misma.

Mañana otra vez monitores, ya estoy convulsionando. Nunca habría sospechado que una simple monitorización me pudiera producir un estado tan salvajemente paranóico. Para mi, cada registro, es un infierno. Dios mio! un infierno.


8 respuestas a “popurrí”

  1. Bueno,veo que ves las cosas de distinto color que ayer. Hoy es todo blanco! eso está bien.
    Seguro que te está quedando un nidito precioso para Malena.
    Por cierto, lo de la publicidad me parece estupendo.
    Mil besos

  2. Me encanta este post!! Está lleno de energyyyy!!! (desde hace un tiempo esta palabra me recuerda inevitablemente a Rafa Mendez de Fama…)

    Así que noooo pares, sigue, sigue… noooo pares, sigue sigue.

    Besicos a ti y a Tiempos.
    (a mi me parece fenomenal lo de la publi)

  3. De todo se sale Carmen, te lo digo por el monosueldo, yo vivo con mis 2 hijas y me apaño, de la mayor si tengo «ayuda» de su padre pero de la pequeña como se «esfumo» tampoco percibo nada pero yo como tu dices, no vendo a mi hija por 100 o 200 euros, faltaria mas, si no hay dinero que la pueda comprar….!! Besicos.

  4. Me gustan tantas noticias, y además buenas!!!!!!
    Ahora a disfrutar de estos días de preparto, a seguir redecorando tu vida y a dar gracias a la vida por haber puesto en tu camino a una persona tan maravillosa como Caro.
    Por cierto, veo que has puesto publi en el blog. Está genial, con lo que te lo curras te mereces una «compensación» económica, cuanto menos!!! Y dedícalo a comprarle cositas preciosas a nuestra niña, vale?
    Besosssssss

    • Gracias cielo, sé que te alegras de verdad.

      Lo de la publi es fruto de otra nueva paranoia: es ahora cuando estoy siendo consciente que estoy realmente «sola» a todos los niveles: emocional y económicamente. Con suerte, si el padre de la criatura sigue desaparecido (no quiero darle la paternidad, no pienso pedirle ni un duro, no vendo a mi niña por trescientos míseros euros), Malena y yo seremos una familia monoparental pero eso también significa familia «monosueldo». La verdad es que hasta ahora he vivido muy bien pero tal y como está el patio, la llegada de Malena me crea una inseguridad tremenda. No quería poner publi, «estropea» la estética y desvirtúa el fin del blog pero los de la agencia insistían. Hasta ahora me había negado pero el viernes cambié de opinión. Qué quieres que te diga, me va a dar justito para pagar los pañales y los gastos de hosting pero algo es algo. Por lo que pueda pasar, el blog tiene que seguir creciendo!!!

      Un besazo grandísimo

      • Pues a mi me parece perfecto, y no me molesta para nada. Evidentemente al cambiar un poco la estructura de los bloques (post más leidos, últimas entradas, etc.) tardaremos unos días en acostumbrarnos, pero qué quieres que te diga, merece la pena!
        El tema monosueldo no es ninguna paranoia, es la realidad, y mira, igual no es mucho dinero, pero como dice el refrán «un grano no hace el granero pero ayuda al compañero».

        • claro que si! la publi está para lo que está! mejor que J piense que no es suya, ah y recuerda hacer la declaracion de la renta el año que viene conjunta con ella! yo no lo sabia y es una pasta…
          me encanta lo de la capsula, bien hecho! en cuanto a los muebles no te preocupes, ya tendras tiempo, yo con la niña he ido a ikea (con un foulard claro) y tan ricamente, le daba teta cuando queria (en el mismo foulard y ya)