yo, venus de willendorf


diosa de la fertilidad
Venus de Willendorf, diosa de la fertilidad. http://www.marxist.com/apuntes-marxistas-sobre-origen-del-arte.htm

Mi vida no era precisamente una maravilla antes de quedarme embarazada pero era mía. Me suicidaba poco a poco con mi Marlboro y mis Gin-Tonics, dormía los domingos hasta las tres de la tarde, me recreaba poniendo incandescente la tarjeta de crédito en tiendas que no empezaban por Z de Zara y S de Stradivarius y hasta disfrutaba de mi relación en pareja con un niñato buenorro al que le ponía aparearse en cualquier parte.

Hoy mi vida sí debería de ser una maravilla. De papel couché: «recién parida amamanta todo el día a bebé sano, liberada de relación sentimental enfermiza con un retrasado, con contrato recientemente renovado y  a sólo dos kilos de su peso». Pero mi vida hoy ya no es mía, ni consigo sentirme tan feliz como pretenden la literatura y los medios que divulgan las bondades de las madres abnegadas.

Pues no. No soy una madre abnegada, ¡qué coño! Lloro de rabia cuando, a las cuatro de la madrugada,  Malena no suelta el eructito, reniego de mi cuerpo serrano de diosa de la fertilidad, lloro cuando salgo de la ducha y descubro lorzas de piel colgando de mi inexistente cintura, detesto estar todo el día con la teta fuera, tiemblo de la emoción cuando lanzo a Malena a la cuna después de cada toma para poder echar una cabezadita, disfruto de cada minuto sola, anhelo las tardes de verano en las terracitas del centro bebiendo cerveza fría, odio descubrirme en pijama a las cinco de la tarde.  Y lo peor de todo: me acabo de fumar un cigarro y estoy en la gloria bendita. Ni un ápice de remordimiento.

Ayer volví del pediatra. Era la primera visita de Malena. Llegué temblando, casi rezaba como siempre que voy al médico y espero horrorizada el anuncio terrible de enfermedad terminal. Al terminar la visita me dio la enhorabuena. «¿Por qué?» le dije yo «por la niña sana y guapa que acaba de parir» «Ah!» Dije con cara de boba. No había caído. Cuando  regresé a casa, (en la que, por cierto, parece que ha caído una bomba y el caos inunda cada níveo rincón) llevaba todavía clavadas en el corazón cada palabra del bondadoso pediatra y mi indiferencia como respuesta. Me hinché a llorar.

Resulta evidente que el vínculo con mi niña sigue brillando por su ausencia.

Amparo, hoy te dedico mi entrada y quiero que sepas que es sólo mi aperitivo del día a día. Aún hay más pero creo que por hoy es suficiente. No, no soy inmensamente feliz. Me he convertido en venus, estoy agotada, tengo sueño y mi tiempo ya no es mío. Mi vida (y mi cintura) por desgracia, tampoco: me las ha robado esta cosa bonita que tengo dormida en los brazos mientras escribo.


21 respuestas a “yo, venus de willendorf”

  1. siempre he dicho q lo peor de todo esto no es ni el embarazo ni el parto…. es el postparto… más concretamente los dos primeros meses… son lo peor!!! no desesperes… es lo más normal del mundo todo lo q te pasa… pero sé q al final, como todas, darás tu vida por ella….
    fúmate ese cigarro por dios!!! si fuese tan malo, ninguna estaríamos aquí.. en la época de nuestras madres no sabían nada de eso y eran más felices.. los excesos de información nunca fueron buenos!! 🙂

  2. ¡Ánimo todas!

    Existe la depresión postparto y la tristeza postparto. Hay niveles y comportamientos, por aquí andamos en tristeza que es normal no te me preocupes Carmen, a mi me dio muy fuerte la primer semana, por el bebé, por mi cuerpo, por mi relación con la gente en general.

    Pero ánimo algunas pasamos la transición más rápido que otras algunas avanzan hasta la depresión postparto debido a las circunstancias, a mi por ejemplo me ha caído de maravilla empezar a ver gente que ya fue mamá en el facebook… leer tu blog y algunos foritos. Aun tengo pendiente moverme más, pero mientras más te ocupes menos tristeza sentirás.

    En cuanto a la indiferencia tampoco… ánimo, métete en la cabeza que es transitorio y ayúdate rodeándote de gente agradable para ti.

    Otra cosa que hago es tener mis frases para darme ánimo, las he pegado en varios lugares de la casa y así me voy dando coraje para seguir aunque esté algo apaleada.

    ¡Besos!

  3. Estoy con Sara al 100%!

    Carmen, qué gracia al leer el título de hoy, precisamente la semana pasada hice referencia a mi misma como la susodicha venus de W.

    Y es más! El lunes por la noche, atacada e histérica de los nervios por una batalla con mi madre, me fumé un cigarro como una señora! De 32 semanas y desde la 6 sin fumar, me eché un Lucky que me supo a rayos pero me quedé tan ancha!

    Lo estás haciendo muy bien Carmen, no te engañes, desahogate y raja todo lo que necesites, pero quedate tranquila, todo está bien y estará mejor a medio plazo por lo menos xD! Además, tu eres una guerrera, puedes con esto. Lo sabes. Es difícil, y es duro, y seguro que es x10 peor de lo que cualquiera nos hubieramos imaginado, pero tú puedes!

    Besis para las dos^^

    • ¡Qué bueno! ¿ens erio te definiste a ti misma como la Venus de Willendorf? Jajajaja! y el cigarro! ¿que me dices de eso? Tú te quedaste como una señora, yo como Dios porque me supo a gloria bendita.

      Seguiré rajando, no lo dudes. Es divertido y terapéutico comprobar que me comprendéis!

      Un abrazo

  4. ohhhhh, siiiiii, cigarritoooooo

    te cuento que en la primera comida en casa al salir del hospital, mi suegro, un profesional sanitario jubilado, me recomendó que me tomara una o dos cervezas al día para que me subiera bien la leche. Yo sabía que esa recomendación hoy no la firmaría ningún médico pero aún así me tomé mis dos cañitas y me quedé como dios. Y después de un embarazo entero sin fumar y visto lo duro del postparto también empecé a fumarme un cigarrito-placer una vez al día cuando acostaba a la niña por la noche. Ahhhh, qué gusto!!!! Dí pecho a mi hija hasta los diez meses y está estupenda.

    Y me gustaría conocer el porqué de tanto sadismo contra las embarazadas y mamás recientes. Como si fuera poco el peso que ya de por sí nos echamos nosotras mismas encima. De repente, todo lo que nos rodea es una amenaza para el desarrollo actual y futuro de nuestros bebés y somos malas madres si no lo evitamos. El jamón, el queso, el café, las bebidas gaseosas, el tabaco y el alcohol «of course», el paracetamol (lo que nos faltaba) y hasta el atún y el tinte para el pelo!!!!!!!

    Eso sí, una vez destetados nuestros hijos dará igual que se inflen a cocacolas y chuches hasta las trancas de aditivos artificiales o que respiren el aire contaminado de nuestras ciudades o que tengan que jugar en un parquecito público de 2 x 2 metros rodeados de coches embotellados. Porque eso es el progreso, pero que una mamá se eche un cigarrito de vez en cuando… Ah no! eso es un atentado contra la infancia…

    Pues eso Carmen, nada de culpas y estáte muy orgullosa de tí, lo que haces es heróico y verás cómo poco a poco le vas pillando el gusto.

    • carmen, como veras las chicas tienen toda la razón y además lo expresan estupendamente! Lo de la mochila con el sentimiento de culpa que nos cuelgan en el paritorio que decían el otro día es increible, tener que estar demostrando continuamente que somos las mejores, que podemos con todo y además con toda la felicidad del mundo…

      • por cierto, yo también me acuerdo aún del cigarrito y el tercio de cerveza especial en la terracita!

    • Ay qué bueno estaba el cigarritooooooo!!!

      Sé que la nicotina noe s buena para los bebés, que pasa a través de la leche, pero… ese cigarrito estaba peligrosamente bueno, ha sido como si no hubiera dejado de fumar… Mmmmmmm!

      Tienes más razón que un santo. estoy un poco cansada de tantas restricciones físicas…

      Un cigarrito de vez en cuando… siiiiii , Mmmmm!

  5. Carmen,
    coge a Malena y sal a la calle, vives en Madrid, no? pues metete en un museo con el aire acondiconado a tope, pero NO TE ENCIERRES!!!!
    Normal todo lo que dices, por mucho que les llevemos dentro 9 meses no les conocemos.

    Un besito

    • No me encierro Tachan, sólo que a veces son las siete de la tarde y todavía no he podido ducharme…

      un beso!

      • aaaamiga, bienvenida al muno de las mamis recien paridas! jeje, es que es una frase que he escuchado y vivido tanto que hasta me hace gracia 😉

  6. Mira, tienes todo el derecho a sentirte como tú quieras, todo llegará. Parece que existe como una especie de obligación a que las mujeres recién paridas nos sintamos plenas, felices y realizadas. Cuando en realidad nos estamos enfrentando a mil cambios que no creo que sean fáciles de asumir. De hecho pienso que muchas de nosotras nos hemos pasado décadas teniendo que mentir acerca de las sensaciones que tenías que sentir con la maternidad por miedo a ser juzgadas. Así que siéntete como quieras y sin culpabilidad que ya está bien! Un besito fuerte y felicidades!!

    • Gracias Carlota. Para mi es alucinante comprobar que me comprendéis a la perfección.

      Un besaco

  7. Carmen, te entiendo perfectamente… El comienzo es MUY duro, y más aún en tus circunstancias.
    Sólo te pido que confíes en mí, sabes que en todo momento he sido muy sincera contigo: esto también pasará y todo volverá a estar en orden.
    Eso sí, será un orden DIFERENTE al anterior. Tu vida ha cambiado para siempre, no es que no sea tu vida, es que tu vida ha dado un giro radical. Y ahora estás convulsa porque tienes que adaptarte a las nuevas circunstancias. Es cuestión de tiempo, poco a poco te irás haciendo a tu nueva vida, te irás organizando y tu cuerpo volverá a ser el de antes (te lo aseguro!). No tengas prisa, poco a poco.
    Los primeros meses son los más difíciles.
    La falta de sueño y la horas con la teta fuera por la lactancia irán mejorando poco a poco: los ciclos de sueño se alargan por la noche y las tomas se acortan.
    La cervecita sin alcohol está muy rica, queda con tus amigas a tomar algo por la tarde sin miedo. Afortunadamente hay terrazas abiertas por la tarde, y los bares son zonas sin humo, no pasa nada porque lleves a Malena en su súper Peloenpecho y te rodees de gente que te mime y te cuide.
    No te as a sentir una madre «feliz» o «eufórica» en un tiempo. No pasa nada, es normal. Te estás adaptando. Todo llega, y llega antes de que te des cuenta, y lo llena todo.
    Confía, Carmen, confía… Todo llega.
    Carmen, como te dijo el médico, ENHORABUENA por todo!!!!!

    • Gracias de nuevo tiempos, se que tienes razón, intentaré yo también aplicarme el cuento.
      Carmen como imaginas entiendo perfectamente lo que sientes, te deseo (y me deseo) toda la paciencia del mundo, un beso grande

      • Amparo, gracias por tus palabras. A veces me planteo si doy la sensacion de petarda o marisabidilla… No es mi intención, pero hace pocos meses yo estaba como vosotras, y si no llega a ser por una buena amiga que me explicó que todo lo que me pasaba era normal, quizás hubiera caido en una depresión postparto… Me sentía taaaan mala madre por no estar radiante!!! Ahora me toca a mi deciros que tengáis paciencia, que todo llega y dentro de poco seréis vosotras las que le estaréis animando a vuestras amigas primerizas… Ahora seguro que esa idea te parece ciencia ficción, pero te prometo que ese día llegará antes de que te des cuenta.
        Animo a todasssss!!! PODEMOSSS!!

    • Gracias Tiempos. Como siempre, me eliges las palabras adecuadas para hacerme reaccionar. Sé que todo pasará y que va a ir mejorando día a día. Pero como le he dicho a Mariana me siento culpable por no sentirme «eufórica».

      Un beso gordísimo

  8. Animo preciosa, date un tiempo, es lógico q te sientas así, tu vida ha dado un giro de 180 grados y encima las hormonas te la juegan.

    La depresión postparto es normal, sólo vigila q la cosa no vaya a más y pide ayuda.

    Le recomendé a Amparo el libro de la Gutman, a ti tb vendría bien.

    Un abrazo grande niña!!!

    • No me siento deprimida (creo) sólo sobrepasada y «no feliz». Estoy bastante cansada e indiferente con mi pequeñaja. Me entristece y me hace sentir culpable. Sólo eso. ¿Estoy con depresión postparto?

      • A ver, yo le llamo depresión postparto a lo q tú estas viviendo ahora mismo, creo q hay muchos niveles, pero creo q lo tuyo no es preocupante, q todo esta dentro de la normalidad.

        Estoy convencida de q pasará, sólo digo a si te sientes superada no lo escondas, q si necesitas ayuda no te cortes y la pidas.

        Seguramente te parezco muy extremista, pero se a esta época es delicada y quiero q estés lo mejor posible.

        Me pongo en tu piel y siento q debo hacer algo!!!!

        Más cariños para las dos….